viernes, 7 de octubre de 2016

Murió mi maestro de fotografía, Don Roberto, lo recordaré con cariño. 

Él me enseño a hacer bien las cosas, también a hacer bien cosas mal hechas, y a hacer cosas que uno no debería hacer, y siempre lo hizo con paciencia y cuidado. 

Definitivamente soy mejor fotógrafo de lo que habría sido por mi mismo gracias a su amistad y sus enseñanzas. 

Hasta siempre.

Roberto Contreras Ordáz
1951-2016