El cambio verdadero está en tus manos

Decía el lema de AMLO en las elecciones, y lo sigue estando, pero no tanto en las marchas y las protestas, que me siguen pareciendo legítimas pero perfectamente inútiles en un país en que la democracia es solo nominal y que muchas de las decisiones y pactos son entre grupos de poder fácticos, y hay que reconocer que la ciudadanía hasta ahora no se había manifestado claramente en contra de ello y que sigue sin ser muy elocuente ni en su protesta, mucho menos en sus propuestas. Es decir, claramente en México la ley es como el pito de Nacho Vidal: está en boca de todos pero a la hora de la verdad, a la hora de cumplirla todo mundo le hace el feo y la esquiva. 


A lo que voy es que, hay muchas maneras de transformar este país desde hoy y que pueden repercutir en 6 años y que entonces con toda claridad no se atrevan a fraguar otro fraude u otra campaña tan desaseada e ilegal como los que hemos visto en los últimos 25 años, poco mas o menos, y es que los grandes cambios no se hacen de un día para otro, espontaneamente y en regiones o aspectos selectos de la realidad nacional. Es mucho más complejo que eso y ahora sí empieza el regaño. 


Muchos pensarán que mi propuesta es conformarse y ver como le hacemos para que no nos la apliquen en 2018, si eso creen que poco me conocen y no sé que entiendan por "poder ciudadano" y por acción política o por "ciudadanizar" la política y las instituciones. 


Mi propuesta es trabajar en la base, con la gente, con los vecinos, los amigos y los familiares, que sepan que lo que cuenta no es tanto el presidente en turno, o los partidos o las instituciones que los presentan, sino nosotros que los mantenemos y los legitimamos muchas veces con acciones omisas y sin comprometernos con la realidad más inmediata. 


Hablan de la revolución constantemente pero no los veo revolucionando sus vidas, los veo pasarse los altos, pagar mordidas, odiar a los vecinos, comprar malos productos en malas tiendas de malas industrias, entretenerse con basura y un sin fin de cosas que les parecen muy normales pero que si vieran con más cuidado les debería ofender más que si el IFE o el TRIFE o el PRI o el PAN y sus tranzas solapadas. 


Mi idea es esta: detrás de las apariencias hay muchas mas cosas que no quieren reconocer aun cuando lo saben desde hace mucho tiempo y que cuando nos sinceremos los unos con los otros y con nosotros mismos, habremos dado el paso mas importante: somos electores no porque votamos, sino porque todos los días escogemos la vida que queremos y nuestra sociedad, y si asumimos o no las consecuencias de las decisiones que parecen las mas triviales, pero que cuando se suman, son fundamentales... (ahora creo que cito sin decirlo a Sartre, que no me cae bien). Ustedes tienen el poder poque ustedes pueden decidir el rumbo del país cada día y no cada 6 años.


Sólo quería aclarar eso que creo que mi entrada anterior no especificó del todo bien: el poder ciudadano no sólo marcha, sobre todo actua en la cotidianidad. 


Saludazos...