jueves, 28 de mayo de 2015

"El espíritu no es un hueso"

Estas líneas son para recordar y honrar a José Ignacio Palencia 


José Ignacio Palencia 
(1935-2015)

Fue maestro de muchos y un gran filósofo, y en excelente hegeliano. Aunque nunca fue líder de masas ni mucho menos, no tenía un séquito, ni fans, pero ciertamente creó escuela en la Facultad de Filosofía y Letras. Hay mucha gente que no estaba de acuerdo con su lectura de la Fenomenología del Espíritu o de la Ciencia de la Lógica, sin embargo era sabido por muchos que había que dialogar con él en muchos aspectos para tener una mejor comprensión de estos textos y en general de la filosofía de Hegel, y de la filosofía. 

Me atrevería a decir que en FFyL había tres tipos de hegelianos cuando yo estudié la carrera: los alumnos de Palencia, los alumnos de Ricardo Guerra, y los que habían estudiado con alguien más, pero ese alguien más era o alumno de Palencia o de Guerra. Yo afortunadamente tuve oportunidad de estudiar con ambos, pero me inclino un poco mas hacía el buen Profe Palencia, pero mas bien por motivos personales. 

Era el hermano de Xavier Palencia, que trabajó muchos años en el CCH y era un amigo cercano de mis padres que conocían también bastante bien a José Ignacio. De hecho mi madre me contó una anécdota un poco tonta pero divertida cuando empecé a tomar clases con él, me dijo que cuando yo nací se confundía cuando XPalencia le comentaba algo de su hermano, pues tenemos el mismo nombre, José Ignacio. Claro, yo no me llamo así por él, sino por que es un nombre familiar antiquísimo y viene de una larga línea de José-algo en la familia de mi padre, total que mi madre pensaba en mí cuando Xavier decía algo de su hermano José Ignacio Palencia, y que se preguntaba como un bebé podía escribir de filosofía. 

Creo que cuando yo tomé la decisión de estudiar filosofía mis padres no se sorprendieron porque era como poner una "sucursal" más del "negocio" familiar y porque ya conocían a un gran filósofo llamado José Ignacio (aunque aún queda la duda de que tan bueno soy yo en eso). 

Sin embargo, como dije antes, Palencia era un maestro que hizo escuela, formó a muchísima gente y aunque podía parecer parco y distante siempre sabía quienes eran sus alumnos y que pensaban de cada parte que habíamos estudiado con él, era además un maestro que podía estar fuera de la dinámica del amor-por-las-novedades y se daba chance de leer y re-leer los textos básicos de Hegel, bueno, la Fenomenología, la Ciencia de la Lógica y alguna vez la Enciclopedia de las Ciencias Filosóficas con la paciencia y el ritmo necesarios para hacerlo lo mas comprensible que le fuera posible. Se tomaba el tiempo necesario para leerlas con cada grupo (seminarios de dos años, por ejemplo). Yo cursé uno de ellos, para la Ciencia de la Lógica, la Fenomenología la estudié con él en Ontología. 

Y es curioso, porque estos días había estado pensando en él, por dos razones.  

- Resulta que Katya, la chica de la que hablaba hace una semana, hizo su tesis de licenciatura con él, y en cuanto la empecé a leer noté ese cuidad y esa guía tan peculiar que Palencia tenía, y no puede evitar compararlo con las tesis de otros amigos sobre Hegel que trabajaron con otras personas y que se nota que esas tesis fueron hechas casi casi en una línea de ensamblaje, la diferencia puede ser sutil, e insisto, a muchos no les parecían algunos aspectos de su interpretación, pero creo que para estudiar a Hegel en serio, había que pasar por el salón de José Ignacio Palencia o por el de Ricardo Guerra. Lamentablemente ambos ya nos han abandonado

- Me parece que murió el lunes en la madrugada, el domingo en la noche yo estaba releyendo a Zizek y me acordé de él porque en algún momento Zizek menciona un pasaje de la Fenomenología en la que Hegel dice que la falsedad de la frenología está en pensar que "El espíritu es el hueso" (el cráneo), y con esta pequeña observación Hegel hace uno de los chistes mas oscuros de la historia de la filosofía pero que a Palencia le divertía mucho, sobre todo porque, como explicaba, ponía en juego la dialéctica y la negatividad: no, el espíritu no es el hueso, la forma de la cabeza no determina la personalidad, pero al mismo tiempo, no hay posibilidad de una "personalidad" si no esta contenida o atada a un hueso, y que en la relación del hueso y el espíritu, o de la mente y del cuerpo aparece el Espíritu, pero solo mediante esta relación dialéctica negativa, esto no es eso como el para-sí no es el en-sí (o algo así), y sin embargo, en dicha relación mediatizada aparece la conciencia, el para mí, que luego, muchos movimientos después, se eleva hasta el Espíritu Absoluto. 

No quiero pensar que ambas cosas tienen una relación causal, pero me pareció curioso, y hasta cierta ternura, pensar que mi último recuerdo del Profe Palencia es como sonreía al explicar este oscuro chiste, y de como mucho de mi lectura de Hegel depende de él. 

Lo extrañaré, sin duda. 

martes, 19 de mayo de 2015

La etiqueta que a veces uso de "a veces se me va un poco el pedo" sirve para describir cosas como la que me pasó hoy que estuve en Ciudad Universitaria. 

Hoy tuve la oportunidad de conocer a IColmenares, que ha trabajado años con mi padre y que han estado juntos en mil cosas de la Universidad, me lo presentó en la entrada de su oficina y después resultó que él iba a la Biblioteca Central, que está junto a la Facultad de Filosofía y Letras. Nos despedimos de mi padre y mientras platicábamos de camino me dijo que su hija también había estudiado filosofía y que también estaba metida en cosas de medios de comunicación, concretamente haciendo cosas de cine, guiones.

Estuvimos de acuerdo en que la filosofía está pasando por un momento en que debe hacer dos cosas: tomarse en serio la divulgación, y explorar otros medios de comunicar la filosofía. Debí haberle preguntado en ese momento dónde podría contactarla porque entre los planes que estoy desarrollando necesitaré alguna ayuda con cosas de guiones cinematográficos. 

Horas después se me ocurrió que podría ser el padre de Katya, una chica que iba un par de años arriba de mi en el Cole Madri y luego en la licenciatura, y estuve con ella y con AVázquez en una onda de elección de consejos técnicos (¿o académicos?) para el Colegio de Filosofía de la Facultad (y como dato adicional es la chica que me enseño ha hacer mini ranas de papel, que es parte de esta otra anécdota).  

Y tengo estas dos fotos suyas mal escaneadas que me gustan mucho, son de mis preferidas de esa época:  



Y cuando digo que me tomó horas pensar que podía ser su hija es literal, no fue sino hasta en la tarde que terminé con todo lo que tenía que hacer me puse a pensar: no es un apellido tan común y él no es muy alto, Katya tampoco, ambas chicas estudiaron filosofía, él es un personaje que está muy metido en cosas de cultura y medios. 

No lo sé, seguramente la próxima vez que lo vea se me olvide preguntarle si es su hija, y tal vez pasen años antes de que pueda despejar la duda. 

A veces se me va un poco el pedo.